jueves, 2 de mayo de 2013

Zonas habitables; La vida ¿ está más allá o mas acá?

Quizás debamos aprender a ser más tolerantes a la hora de poner esas fronteras y definir cuales son las zonas de habitabilidad donde puedan darse las exo-tierras. ¿El porque de mi afirmación? Lo despejo mas abajo.-

Partamos por el concepto básico que hoy tenemos al respecto, este nos indica que “ La zona habitable ( ZH) plantea que un planeta rocoso - como la tierra- o un satélite, debe estar ubicado en la región alrededor de una estrella en donde es posible la existencia de agua líquida sobre la superficie para que la vida pueda prosperar en él, pero además se agrega que debe tener una masa comprendida entre 0,6 y 10 masas terrestres y una presión atmosférica superior a los 6,1 mb correspondiente al punto triple del agua ( agua en estado líquido, sólido o gaseoso).


Las Fronteras de la ZH en nuestro sistema solar.-



En nuestro sistema la ZH la hemos delimitado entre las órbitas de Venus y Marte, entre 0.95 UA y 1.15 UA (entre 5% más adentro y 15% más afuera de nuestra órbita actual). Dada la evolución que ha sufrido nuestro Sol (el cual tiende a volverse más grande y más brillante con el tiempo), esta zona se ha ido desplazando desde adentro hacia afuera. Por esta razón, sólo la Tierra podría tener las condiciones correctas para soportar la vida (aunque no se descarta que pudieran quedar nichos donde la vida aún pudiera abrirse camino en Venus y Marte).

_En base a los parámetros mencionados, pareciera ser completamente descartable e ilógico poder pensar en encontrar algún ambiente o mucho mas una posibilidad de vida fuera de esas zonas._

Microclimas exteriores.-

Paradojicamente, hoy nos encontramos en la disyuntiva que, las mayores posibilidades de encontrar Agua líquida y por cierto aunque sea un rastro de vida en nuestro propio Sistema Solar, se encuentra en las zonas exteriores del Sistema, es decir en los mismos lugares que habiamos descartado y por cierto que se encuentran muy lejanos a los margenes de las llamadas zonas de Habitabilidad.

Conoscamos a alguno de esos candidatos.

Titán :



Su orbita y taza de rotación nos indican que puede contener un gigantesco océano de agua líquida superior a todas las aguas existentes en nuestro planeta. La mayor luna de Saturno, ha sido un foco un gran foco de atención en particular debido a su densa y compleja atmósfera, su clima y sus lagos y océanos.
Las pruebas a lo anterior proceden de las observaciones de la órbita y rotación de este satélite, todo indica que este tiene la misma que nuestra Luna, es decir, siempre presenta la misma cara a Saturno y su eje de rotación se inclina en 0,3 grados apróx. Con estos antecedentes y calculando su momento de inercia podemos vislumbrar algo muy interesante, que el momento de inercia solo puede ser explicado si este es un cuerpo mas sólido mas denso en su superficie que en su centro. Algo que resulta muy extraño dado que sabemos como se forman los planetas y las Lunas,
Agua Líquida.-
Pero si realizamos algunos cálculos para ver si un modelo líquido es compatible con el momento de inercia medido. “Asumimos la presencia de un océano de agua líquida bajo una capa de hielo y consideramos las fuerzas de presión y gravitatorias que surgen entre las distintas capas del satélite”, concluimos que el momento de inercia de Titán puede explicarse perfectamente por la presencia de un océano líquido bajo la capa helada.

Europa.-



Una de las lunas de Júpiter, pareciera según los últimos estudios contener un cuerpo de agua en estado líquido, con un volumen similar al de los Grandes Lagos de Norteamérica, encerrado dentro de su corteza helada, la información además señala que el agua podría representar un hábitat potencial para la vida y podrían existir muchos más lagos en las regiones poco profundas de la corteza de Europa.

Además, el recién descubierto lago está cubierto por plataformas de hielo flotante que parecen estar colapsando entre sí, proporcionando un mecanismo para la transferencia de nutrientes y energía entre la superficie y el vasto océano bajo la capa de hielo.
Y por último y quizás mas intrigante es que si la capa de hielo es gruesa, este hecho impediría que la superficie se comunicase con el océano subyacente, sin impedir el flujo energético y por cierto, lo que podría hacer de Europa y su océano "lugares más habitables".

Plutón.-



Nuestro ex compañero planetario, hoy degradado a “planeta enano”, quizás nos tenga preparado su desquite y este ha de ser muy jugoso, según se está constatando, pareciera ser que este diminuto planeta, podría contener un Océano de agua líquida bajo su helada superficie. Algo que podremos dilucidar sin dudas, cuando la sonda llegue hasta allí, la nave estudiará la temperatura, la composición atmosférica y el viento solar a su alrededor. Las características de su superficie (está compuesta por una fina capa de nitrógeno helado que cubre otra capa de agua también helada) darán pistas sobre lo que hay debajo, y observará si hay géiseres como en Encélado.

Aunque aún los escépticos piensan que Plutón parece un candidato poco probable para albergar un océano, incluso bajo tierra. El calor para derretir el hielo puede provenir de su interior, quizás, la principal fuente de energía probablemente derive de su interior rocoso, donde los isótopos sufren decaimiento radiactivo y se cree puede haber potasio, necesario para mantener el océano.

Cinturón de Kuiper.-



Si se llega a comprobar la existencia de agua en Plutón, claramente esto nos sugeriría que otros objetos del Cinturón de Kuiper también podrían tener sus mares; no sólo agua líquida, sino también los ingredientes necesarios para la vida de los que Plutón es probable que carezca.

………..Y así como podéis apreciar, hemos ingresado a la zona de los Cometas, casi llegando al límite heliosférico, ese lugar frío y oscuro, donde otra paradoja se nos muestra, acá es junto a la nube de Hoort, el lugar donde residen los cometas.

La Paradoja se nos vuelve

Pero bueno, lo único cierto es que de salto en salto, hemos abandonado esa área de habitabilidad y ya nos encontramos en casi los límites del sistema heliosférico, un lugar frío y oscuro en donde no debería existir ningún indicio de vida y por cierto lugar donde abundan los cometas y es allí donde la paradoja se nos vuelve a asomar, pues la conjetura de que el agua de nuestro planeta puede haber llegado gracias a los cometas, se nos hace cada día mas y mas real, no por menos, de acuerdo a los últimos estudios, se ha encontrado restos de agua muy similar a la que ocupa tres cuartas partes de la Tierra en un lejano cometa. Se trata del 103P/Hartley 2, un cuerpo celeste originado en el Cinturón Kuiper, que es de la familia de Júpiter.

Para avalar esto último digamos que en Noviembre del año pasado, gracias al telescopio Herschel, se logró detectar la composición de este cometa, determinando que la proporción deuterio/hidrógeno en su agua era de 1,61, cuando en la Tierra es de 1,55. "Estos resultados son una pieza fundamental en el gran rompecabezas de cómo y cuándo los océanos llegaron a ser lo que son, sin los cuales la vida no sería posible en la Tierra. Claramente los resultados ganan peso, sobre la posibilidad de que el origen del agua, y de la vida, surgiera en estos cuerpos celestes hechos de hielo y rocas, ubicados en el Cinturón de Kuiper lugar que se encuentra cerca de Plutón y 30 veces más lejos del Sol que la Tierra.

Rebasando la Biósfera profunda de nuestro planeta

Hasta hace muy poco, pensabamos que la biosfera en la tierra, esa zona o mejor dicho límite que se extiende a cientos o miles de metros bajo el suelo, solo podía ser habitado por organismos unicelulares como las bacterias, pues bién, hoy se ha encontrado varias especies de gusanos del tamaño de un grano de arena y cuya simple existencia nos hecha por tierra la visión que teniamos sobre los ecosistemas profundos de la corteza terrestre. Entre las criaturas, rescatadas de perforaciones comerciales en minas de oro y diamantes, hay una especie totalmente desconocida hasta ahora, pero emparentada con otros gusanos que viven sobre la Tierra. Sus descubridores lo han llamado Halicephalobus mephisto, en referencia a Mefistófeles, "aquel que no ama la luz" y que representa "al demonio, rey del mundo subterráneo". La nueva criatura, un nematodo, fue encontrada en agua extraída entre rocas a 1,3 kilómetros de profundidad. Aunque no lleva tridente, una de sus características únicas es la larga y afilada cola.



El mefisto y otras especies de gusanos de menos de un milímetro se han recuperado de profundidades de entre 0,9 y 3,6 kilómetros. luego de rescatarlos, se pudo comprobar que se alimentan de las mismas bacterias con las que comparten la corteza terrestre. Su reproducción es asexual y son capaces de vivir apenas sin oxígeno y a más de 40 grados.
El hallazgo de los gusanos, animales pluricelulares, a kilómetros bajo tierra abre un nuevo orden de posibilidades sobre cómo y donde pueden vivir los seres extraterrestres.

Conclusión.

Dados los antecedentes creo necesario re- estudiar las llamadas zonas de habitabilidad, toda vez que claramente hemos demostrado que la vida se puede dar en sectores distintos, quizás como ocurre acá en nuestra, donde los extremófilos han demostrado que la vida se puede generar en los lugares más extremos e insospechados.

Por otro lado y basados en la premisa anterior, podríamos estar buscando en otros sistemas solares la vida en las llamadas zonas habitables, dejando fuera sectores donde se podrían generar lo que podríamos llamar “micro-climas prudentes” aquellas zonas que se producen por la interactividad de algunas lunas y planetas gaseosos, claramente aptas para contener agua líquida.

Amigos, hoy he querido dejar planteado esto, una hipótesis, pero con muchos hechos comprobables, que solo demuestran que la naturaleza, por mas que tratemos de interpretarla y comprenderla, cada día nos manda un balde de agua fría que nos lleva a replantearnos una y otra vez lo creemos comprender.