lunes, 1 de agosto de 2011

Hallan océano salado subterráneo en un satélite de Saturno



La sonda interplanetaria Cassini de la NASA, ESA y la Agencia Espacial Italiana, que desde 2004 investiga el sistema de Saturno, ha captado indicios de que en las profundidades de uno de los satélites del planeta se encuentra un océano de agua salada, donde las condiciones podrían favorecer la existencia de vida, informa la revista Nature.

En 2005 la sonda Cassini halló en Encélado, el sexto satélite por su tamaño de los 19 de Saturno, chorros de partículas de vapor hídrico y hielo, que salían al espacio cósmico a través de surcos paralelos cerca del Polo Sur del cuerpo celeste, las llamadas ‘rayas de tigre’.

El descubrimiento llevó a cuestionarse sobre la fuente de las emisiones. Los científicos examinarion varias hipótesis: unos sostenían que bajo la superficie de Encélado existía un océano con agua salada y otros opinaban que los chorros se formaban a partir de las fuentes secas, incluida la sublimación del hielo seco (CO2 congelado). La composición química del hielo que proviene de Encélado quedó clara en 2009, cuando los científicos analizaron el anillo E, uno de los anillos de Saturno, formado por partículas de hielo escapado, pero no se reveló su origen.

Recientemente los investigadores pudieron analizar las muestras de hielo que atrapó la sonda durante sus tres acercamientos a Encélado en 2008 y 2009. Estas partículas que ‘capturó’ el detector de polvo cósmico de la sonda, que se desplaza a una velocidad de 6 a 17 kilómetros por segundo, se evaporaron inmediatamente después de que los componentes de la sustancia fueran sometidos a análisis químico.

Resultó que cerca del 90% de las partículas se asemejan por su composición al agua oceánica y contienen grandes cantidades de sales, así como potasio y sodio. Sin embargo, las anteriores investigaciones del anillo E habían mostrado que sus partículas prácticamente no contienen estas sustancias. Este fenómeno también obtuvo su explicación: las partículas pobres en sal se expulsan a unas velocidades mayores que las cargadas con sal y metales, y llegan a formar el anillo E.

Los nuevos datos evidencian que el océano en Encélado está ubicado en el centro del núcleo rocoso del satélite y su superficie helada, a una profundidad de unos 80 kilómetros. Esta agua lava las sales del núcleo y se eleva hacia la superficie. Cuando en la cáscara helada del cuerpo celeste se forman grietas, la presión bajo la superficie baja bruscamente y el agua empieza a evaporarse y escapar al espacio, donde se congela. Las capas de hielo por fin tapan las grietas y la evaporación se suspende hasta la aparición de una nueva fisura.

Según informó Nicolas Altobelli, el colaborador del grupo de Cassini en la Agencia Espacial Europea, este descubrimiento es un importante testimonio de que en los satélites de los gigantes gaseosos pueden existir condiciones que favorezcan la aparición de la vida.

Articulo completo en: http://actualidad.rt.com/ciencia_y_tecnica/cosmos/issue_25916.html

Rusia pone en órbita el ojo espacial que todo lo ve.



El cohete portador Zenit-2SB con el observatorio astrofísico espacial Spektr-R fue lanzado desde el cosmódromo de Baikonur (Kazajistán) a las 09:31 hora local (02:31 GMT), informó la agencia federal espacial rusa Roscosmos.

El observatorio fue creado en el marco del proyecto Radioastrón por la corporación Lávochkin por encargo de Roscosmos. El complejo de equipos científicos lo elaboró el Centro Astrocósmico del Instituto de Física de la Academia de Ciencias de Rusia.

El objetivo del proyecto es llevar a cabo diferentes estudios de varios objetos en el universo con una altísima resolución angular en los rangos de frecuencias centimétrico y decimétrico. El radiotelescopio, que está montado en un módulo de servicio, es una antena de recepción parabólica provista de amplificadores, convertidores y equipos transmisores que enviarán la información recolectada a la Tierra. El reflector de la antena, de 10 metros de diámetro, está dotado de un espejo central y de 27 pétalos.

Según el sitio web del proyecto, la órbita del telescopio tendrá una inclinación de 51,6 grados, un periodo de 7-10 días, un apogeo de 350.000-390.000 km, y un perigeo de 10.000-70.000 km. El radiotelescopio, que tiene una masa de 3.850 kg, tendrá una vida operativa de cinco años.

Spektr R funcionará en conjunto con tres grandes telescopios terrestres, ubicados en Púschino (provincia de Moscú, Rusia), así como en Green Bank (EE. UU.) y Tidbinbilla (Australia).

El complejo permitirá estudiar las profundidades del universo con una gran precisión, explicó el director general de la corporación Lávochkin, Víctor Jártov. "Científicos de todo el mundo esperan estos datos", concluyó el especialista.

Anteriormente se informó de que la precisión del telescopio ruso sería 250 veces mayor que la de los observatorios terrestres y 1.000 veces mayor que la del telescopio orbital Hubble, que será retirado en 2012.

Radioastrón estudiará los núcleos de las galaxias, los agujeros negros supermasivos, las estrellas de neutrones, los campos magnéticos y los rayos cósmicos, entre otros fenómenos. Además, los dispositivos podrán registrar efectos de la materia oscura y la energía oscura, detectar las regiones de formación de estrellas y sistemas planetarios, y medir las características de los púlsares y otras fuentes de irradiación en el espacio.

El lanzamiento de RadioAstrón también ampliará las posibilidades de Rusia de monitorear la actividad solar, que según algunos pronósticos aumentará en los próximos meses.

Articulo completo en: http://actualidad.rt.com/ciencia_y_tecnica/cosmos/issue_27052.html

El telescopio Herschel capta un gran 'símbolo de infinito' en el centro de la galaxia



¿Es el espacio infinito? Más allá de esta compleja pregunta rayana en la metafísica, lo que sí sabemos es que el símbolo matemático del infinito está 'dibujado' en las estrellas, en concreto en el centro de nuestra galaxia. De hecho, el telescopio espacial infrarrojo Herschel ha obtenido de las profundidades del espacio la imagen de un anillo retorcido con forma de ocho acostado semejante al signo del infinito. La formación, constituida de gas denso, se encuentra en el centro de la Vía Láctea.

Anteriormente los astrónomos sólo habían logrado ver una parte de este anillo que se encuentra a una distancia de 600 años luz. El telescopio orbital Herschel ha captado por primera vez el anillo en toda su amplitud, informó el servicio de prensa del Laboratorio de propulsión reactiva de la NASA.

En las imágenes del Herschel se percibe claramente la forma de un anillo compuesto de gas frío y denso mezclado con polvo cósmico. Se trata de una zona de la formación de nuevas estrellas, y los astrónomos explican que, aunque nosotros vemos el objeto cósmico de forma retorcida, en realidad es redondo.

Gracias a las observaciones del radiotelescopio Nobeyama de Japón sabemos que el anillo de gas se mueve como un todo único, a una velocidad constante respecto de la galaxia.

El anillo se encuentra en el centro de la llamada barra de la Vía Láctea, una región abundante en estrellas en medio de los brazos de la galaxia espiral. La barra se encuentra a su vez dentro de un anillo. Como indica Spacedaily, las barras y anillos son estructuras comunes para muchas galaxias.

El proceso de formación de barras y anillos en las galaxias espirales todavía no ha sido descrito en profundidad por la comunidad científica, pero las simulaciones hechas por ordenador muestran cómo este tipo de estructuras podrían surgir como resultado de las interacciones gravitatorias. Por ejemplo, la barra en el centro de la Vía Láctea podría haber sido influida por la galaxia Andrómeda, vecina de la nuestra.

El enigma que rodea al anillo observado por el telescopio Herschel reside en que su centro no coincide con el de nuestra galaxia.

El telescopio infrarrojo Herschel, creado por la Agencia Espacial Europea en colaboración con la NASA, fue puesto en órbita en mayo 2009.

Articulo completo en: http://actualidad.rt.com/ciencia_y_tecnica/cosmos/issue_27162.html

Descubren la mayor reserva de agua del Universo, que supera en 140 billones la terrestre




Los científicos estadounidenses anunciaron el hallazgo de la mayor reserva del agua descubierta en toda la historia de las observaciones astronómicas, informa la revista ´Astrophysical Journal Letters´. Se trata de una cantidad de agua 140 billones de veces mayor que la que está en nuestro planeta.

El agua se sitúa a 12.000 millones de años luz (unos 48.000 millones de billones de kilómetros) de la Tierra en estado de vapor. Todo este vapor rodea a un cuasar, un núcleo galáctico que contiene un agujero negro supermasivo en su centro.

El agujero negro que se encuentra dentro de este cuasar es 20.000 millones de veces más masivo que el Sol y produce mil billones de veces más energía que nuestra estrella.

Un científico de la NASA Matt Bradford caracterizó el descubrimiento como una demostración más de que el agua es un fenómeno habitual para el Universo, que existía incluso en los tiempos más primitivos

Articulo completo en: http://actualidad.rt.com/ciencia_y_tecnica/cosmos/issue_27405.html